Una mujer y un menor fueron asesinados en San José de Apartadó

Las víctimas tuvieron que ser trasladadas por la misma comunidad hasta Medicina Legal, puesto que los peritos judiciales no se trasladaron hasta la zona.

Envueltos en cobijas y cargados en hombros la Comunidad de Paz de San José de Apartadó, en el Urabá antioqueño, entregó los cuerpos sin vida de Nallely Sepúlveda y Edinson David, ante las autoridades investigativas, luego de que fueran asesinados en la finca Las Delicias, propiedad de la Comunidad de Paz.

De acuerdo a la comunidad de La Paz, las víctimas fueron ultimadas a bala, por sujetos armados quienes se dieron a la huida tras cometer el crimen.

Los cadáveres fueron descubiertos por los tres niños, quienes serían hijos Sepúlveda, luego de que regresaran de su colegio en la vereda La Esperanza.

Tras el trágico hallazgo, los menores decidieron regresar al colegio y pedir ayuda a la Junta de Acción Comunal, quienes en conjunto con la comunidad de La Paz, autorizaron la entrada de las autoridades para que hicieran el levantamiento de los cadáveres.

Lamentablemente, después de cinco horas de espera a que llegarán los peritos judiciales, para que se encargaran del proceso, la comunidad se vio en la obligación de envolver en cobijas a la víctimas y trasladarlas en los hombros durante 10 minutos, hasta la cabecera del corregimiento San José de Apartadó, donde fueron entregados a investigadores del CTI para la inspección técnica.

Frente a este doble homicidio, la comunidad tachó a las autoridades de ‘inútiles’, puesto que no sería la primera vez que tienen que trasladar los cuerpos de sus víctimas.

«La Comunidad se verá en la obligación de levantar los cuerpos como en otras ocasiones por la inutilidad del Gobierno», dice el comunicado previo al traslado.

Finalmente, la comunidad rechazó los hechos ocurridos y pidieron que su territorio no se convierta en un sitio de violencia.

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Diario La Piragua

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