Muerte de los cinco niños en Cesar no habría sido un accidente sino un crimen: así lo aseguró el defensor del pueblo Yukpa
Los argumentos del defensor se basan en que una de las víctimas de 15 años presentaba signos de violencia por un golpe en el cráneo y su vestimenta está rasgada.
Tras conocerse el trágico fallecimiento de cinco menores de edad de la comunidad indígena Yukpa, Iroka en el municipio de Codazzi, Cesar, el pasado domingo 24 de marzo, al parecer por el envenenamiento de un fruta prohibida, el defensor del pueblo de esta comunidad, indicó que no se trata de un accidente, sino de un crimen.
“Estos niños indígenas no murieron por algún accidente, algo les hicieron a estos niños. Cristina la niña de 15 años aparece con una herida en el cráneo y aparece con sus vestidos rasgados, esto no fue un accidente, esto fue un crimen contra estos niños. No es cierto que los niños hayan consumido corozo” aseguró Álvarez en declaración pública.
Las declaraciones de Álvarez son dadas bajo sus argumentos puesto que se trasladó hasta la escena donde ocurrió el fallecimiento de los jóvenes y ayudó al traslado de dos que aún se encontraban inconscientes pero minutos después murieron cuando fueron ingresados a un hospital.
Además aseguró que los niños de esa comunidad indígena Iroka están acostumbrados a cazar y recolectar, por lo que saben muy bien que comer y que no, aseverando que fueron obligados a comer la fruta y por ello fallecieron.
Frente a estos terribles hechos el defensor solicitó que a los menores se les practique la autopsia correspondiente para conocer con detalles y las causas exactas de sus muertes.
Así mismo, exigió justicia ante las Fiscalía para que no haya impunidad ante este crimen, como ocurrió en el año 2018 cuando dos niños yukpas fueron envenenados con glifosato.
*Respuesta del Defensor del pueblo, Carlos Carmargo*
Ante este llamado, el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, insistió ante la Fiscalía General de la Nación, que las investigaciones sean adelantadas para determinar responsabilidades ante lo ocurrido, puesto que se trataría de integrantes de una misma familia, por lo que se requiere garantizar los derechos a la justicia, la vida, la integridad cultural, la permanencia y pervivencia cultural del pueblo en este caso, del pueblo Yukpa.
Destacando que esta comunidad se ha visto afectada por una ola de violencia en los últimos años, por lo que ha sido declarada en riesgo de exterminio físico y cultural por la Corte Constitucional mediante el Auto 004 de 2009 y ratificado en el Auto 266 de 2015.
El pueblo indígena Yukpa, ubicado en la Serranía del Perijá, es uno de los últimos pueblos nómadas, seminómadas y agricultores itinerantes, por lo que importante salvaguardar la vida de todos sus integrantes, en especial de los niños puestos que ellos cumples un rol impronta para la reproducción de la cultura.
Es por ello, que ante el lamentable hecho que ha sido rechazado por los distintos sectores del país el Defensor informó que funcionarios de la entidad harán presencia en el resguardo Iroka en aras de verificar la situación de derechos humanos y promover, divulgar y, de manera especial, contribuir a la protección de sus derechos fundamentales.
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